Second Life: una vida virtual.

Reflexionamos sobre la plataforma virtual Second Life. Jesús Lagares expone información sobre este espacio donde conviven, desde hace años,  avatares que simulan vidas. Personajes inventados con características al antojo de los internautas, que juegan a vivir virtualmente experiencias a través de las pantallas. Comenta José Luís que, ya en el año 2005, el espacio ocupado por las parcelas virtuales registradas por todos los usuarios de Second Life, ocupaban lo mismo que todo el territorio de Australia.  Un espacio virtual al que no le faltan empresas, ciudades, o dinero propio. Pero, sobre todo, reflexionamos sobre las implicaciones que puede tener "exportar" a Second Life todo lo bueno y malo que nace de la psique humana, sobre todo, porque la vida real no es un juego, y tampoco debiera concebirse como tal, un mundo virtual donde se pretende que se "juegue" a vivir un yo en el que proyectar los anhelos, pero también los miedos,  en un encuentro artificial controlado desde el otro lado de las pantallas.

El ser humano ante el monolito de la era tecnológica.

                                         (Escena de la película "2001: Odisea en el espacio")

En las dos últimas sesiones, reflexionamos sobre dos aspectos muy presentes en esta era tecnológica que vivimos actualmente la sociedad humana: la inteligencia artificial y la realidad virtual.   A través del grupo de whatsapp nos planteamos la lectura de un reportaje de la revista Ideas del País titulado "El futuro de la humanidad en sus manos", en el que se pone de relieve los objetivos del grupo de trabajo liderado por el filósofo formado en física, neurociencia computacional y matemáticas Nick Bostrom, del Instituto para el Futuro de la Humanidad ubicado en Oxford. El motivo de su lectura es enfocar las sesiones que estos días nos reunirán en Idéame. Entre las muchas ideas que propone dicho texto están la convivencia entre seres humanos y máquinas inteligentes con capacidad de decidir, o "la carrera entre nuestro progreso tecnológico y nuestra sabiduría, que va mucho más despacio", como comenta en el artículo Nick Bostrom. 

El cine ya trató estos temas en el pasado. Stanley Kubrick lo hizo en su obra maestra 2001: Odisea en el Espacio", donde la computadora HAL9000,  que controla todos los sistemas de funcionamiento de la nave espacial donde se desarrolla gran parte de la trama del film, se enfrenta a los astronautas que vuelan en dicha nave, cuando percibe que estos quieren desconectarlo. O la reflexión genial sobre la muerte que hace Roy Batty, replicante, androide, en la película Blade Runner, donde las máquinas anhelan entender y poseer la emoción insustituible de todo organismo vivo por aferrarse a la vida.

                                             (HAL9000, de 2001: Odisea en el espacio)


En la reflexión grupal se alude al miedo ante un futuro donde la incertidumbre desconcertante por una convivencia humana-inteligencia artificial, y la creciente inmersión de nuestra realidad en el mundo virtual, sobre todo a través de las redes sociales, suscita como poco la necesidad de una reflexión serena sobre cómo gestionar estas cuestiones.

      ( Roy Batty, replicante, androide de la película Blade Runner)

El control del tiempo.

Víctor (4ºESO) comienza por el grupo de whatsapp de Idéame un tema a través de la siguiente pregunta: "Si pudieseis controlar el tiempo, ¿qué haríais?".  De forma que, la conversación que surge a través de los móviles, toma forma en esta nueva sesión de Idéame. Y mientra hablamos, la pantalla de la sala proyecta la imagen de una aportación escrita por un antiguo integrante del grupo titulada "El sueño de la inmortalidad". ¿Cómo sería nuestra vida si fuésemos inmortales? ¿Qué haríamos si pudiésemos controlar el tiempo? ¿Y si en realidad el tiempo no existe?...  Reflexionamos sobre estas cuestiones y, de nuevo, afortunadamente, terminamos la sesión con más interrogantes que respuestas. Abrir nuevas puertas para encontrar nuevas salidas hacia el conocimiento.